jueves, 13 de septiembre de 2012

CATEGORIAS DE ÁNGELES 2


 
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nelson
Continuamos con las restantes categorías de ángeles:

LOS PRINCIPADOS

Más allá de los arcángeles están los principados. Son los ángeles guardianes de todos los grandes grupos, desde naciones, ciudades y corporaciones multinacionales, como por ejemplo. la Unesco, la Cruz Roja. Tal vez sería adecuado llamarles ángeles integradores; hay muchos de ellos dedicados a nuestro planeta.

Los principados están a la cabeza de las parroquias y les rodea una gran corte de ángeles, ellos cantan día y noche ante el Santísimo Sacramento, orando por la comunidad parroquial.
Ante el altar ellos adoran al Padre, que generalmente permanece algo olvidado y ofrecen satisfacción pidiendo misericordia por la tibieza de los fieles.
Ellos velan para que los niños sean bautizados y los moribundos reciban los últimos sacramentos.
Cada vez que alguien comete sacrilegio o recibe los sacramentos en forma sacrílega, ellos se inclinan hasta el suelo y hacen intensas oraciones reparadoras.
Ningún sacerdote debería dejar de saludar al ángel del santuario, pues las bendiciones que recibirá son de una grandeza y abundancia inexpresables. El culto a los principados aporta, ante todo, amor y perseverancia a la oración.
Cada vez que pasemos ante una iglesia, saludemos a su protector.Ángel del Santuario, yo te saludo, te doy gracias, y a través tuyo saludo y doy gracias a todos tus hermanos los ángeles que tienen los mismos cargos y las mismas funciones en todos los santuarios del mundo.
Deberíamos agregar una pequeña oración hacia Jesús Sacramentado y tendremos la alegría interior de saber que será presentada por quien es el consolador y reparador de tantos olvidos, ingratitudes y faltas por parte de los hombres: el ángel principado de cada parroquia.

LOS PODERES

El primer orden de la segunda esfera está compuesto por los seres conocidos como Poderes.
Son los portadores de la conciencia de toda la humanidad, los que conservan nuestra historia colectiva.
A esta categoría pertenecen los ángeles del nacimiento y la muerte.
Ellos pueden atraer y retener la energía del plano divino, así como los árboles absorben la energía del sol, de este modo, los Poderes pueden envolvernos a todos en una red de energía espiritual mundial (Ley de atracción por afinidad); así como nuestros diferentes órganos cumplen distintas funciones en nuestro cuerpo, así mismo las diferentes religiones cumplen misiones específicas en el cuerpo espiritual emergente de nuestro planeta.

Los Poderes, están al servicio de los sacerdotes, pastores y ministros. El demonio huye ante ellos. Aquellos que tienen un ángel de este coro con ellos, son privilegiados de Dios.
Este ángel los lleva a conocerse a sí mismos y les proporciona un deseo creciente de perfección; desde entonces, su actividad es bendecida, y si su celo apostólico se debilita, este ángel lo inflama de nuevo. Los capellanes de claustro siempre tienen uno, y los confesores, siempre y cuando se dediquen a conducir y dirigir a las almas hacia el Padre.
Es necesario honrar e invocar a los Poderes cuando se sufre de aridez en la oración, cansancio o desgano espiritual, cada vez que se es tentado a ceder a la cólera o la impaciencia.

En estos tiempos de duras pruebas para las iglesias, se los recomienda a todos los sacerdotes, pastores y ministros, para que les protejan, los guíen y los inspiren en su misión y en su vida.
VIRTUDES

Más allá de los Poderes existe otro grupo de seres celestiales a quienes conocemos como Virtudes.
Son de gran importancia para nosotros porque pueden proyectar grandes niveles de energía divina; a medida que más grupos de personas aprendan a trabajar con los ángeles, habrá una mayor cantidad de energía creadora disponible para nuestro planeta.

Las virtudes personifican la fuerza, Dios les envía a todos aquellos que se esfuerzan por llegar a ser mejores y que una vez eliminada una limitante, usan todos los medios espirituales para seguir adelante y no recaer.

A los pecadores convertidos y a quienes están luchando por salir de vicios y malas costumbres, se les asigna uno de estos ángeles como apoyo y ayuda para superarse. Aquellos que quieren avanzar rápidamente en la vida espiritual deben invocarlos muy especialmente, porque los buenos propósitos muchas veces no bastan, se requiere disciplina, perseverancia y constancia, la fortaleza que aportan las Virtudes es un valioso aporte para el logro de nuestros mejores propósitos.


DOMINIOS O DOMINACIONES

Los Dominios son los seres celestiales que gobiernan las actividades de todos los grupos en las categorías anteriormente descritas. También se ocupan de la integración entre las partes espiritual y material de nuestro mundo.
Reciben sus órdenes directamente del Padre y rara vez se ponen en contacto con los seres humanos en general, pues se ocupan de actividades muy especializadas, no obstante su trabajo sigue vinculado con nuestra realidad.

Asisten a todos aquellos que se esfuerzan en extender el reino de Dios sobre la tierra.
El Padre les envía a quienes están llamados a enseñar, bien sea en una universidad o desde un púlpito, a los misioneros, a los superiores de conventos o seminarios y a todos aquellos que dirigen espiritualmente a otras personas; es fundamental ser muy humildes y dar gloria al Padre constantemente, con lo cual las Dominaciones permanecen cerca de ellos.

Pidámosles por aquellos que viven en el error y falta de fe; para que aquellos a quienes protegen terminen por reconocer y apreciar los logros que provienen del poder y la ayuda de los ángeles.
Cuando se les invoca en etapas de depresión y descorazonamiento, Dios nos concede, a través de ellos, la gracia de la espiritualidad.


TRONOS

El primer orden de este segunda esfera es el de los Tronos. Son ángeles acompañantes de los planetas.
En este momento de nuestra historia es importante tener conciencia de un Trono en especial, el Ángel de la tierra, que es el guardián de nuestro mundo.
Asisten a los Obispos, a las naciones y a las Comunidades de claustro. Llenos de profunda humildad y animados por un gran fervor, presentan a la Santísima Trinidad todas las oraciones, todos los sacrificios, y los renunciamientos llevados a cabo en las diócesis, países y monasterios, ennobleciéndolos y bendiciéndolos con su propia oración.

También les corresponde el mantenimiento del orden social entre los pueblos y hacen todo lo necesario para que la verdad triunfe sobre la mentira, el derecho sobre la injusticia y sobre todo para que el bien triunfe sobre el mal.
En los difíciles tiempos que vivimos, roguémosles para que iluminen a nuestros Obispos y líderes religiosos en todo el mundo, que fortifiquen las naciones y obtengan que todos los claustros lleguen a ser como pararrayos, capaces de detener los rayos del cielo listos a abatirse sobre la tierra, donde el relajamiento de la moral y las buenas costumbres, más la pérdida de fe, dejan prever la intervención de la justicia divina sobre el mundo, ultrajada por tantos errores de violencia y odio.


LOS QUERUBINES

Más arriba de los tronos, en la primera esfera, se encuentran los Querubines. Son los custodios de la luz y las estrellas.
Aunque algo alejados de nuestro plano de realidad, su luz toca nuestras vidas, la luz divina que ellos filtran desde el cielo. Son las espadas de Dios, revestidos de pura y resplandeciente luz; ceñidos de fuego, en su mano tienen una espada incandescente.

Ellos son la representación de la gloria de Dios en el cielo y están prontos a asumir su defensa. Ante el trono del Papa hay cuatro Querubines. Fue un Querubín quien echó a Adán y Eva del paraíso.

Ante muchos santuarios, particularmente venerados, se encuentra un Querubín con su espada.
Invoquemos a los Querubines en las tentaciones contra la fe, contra la virtud de la pureza y cuando se es invadido por inseguridad y falta de firmeza en la espiritualidad. El éxito de esta devoción es maravilloso.


LOS SERAFINES

El orden más alto en la jerarquía de la primera esfera es el de los Serafines; seres celestiales que rodean el trono del Padre Eterno cantando gloria y regulando el movimiento de los cielos, según la voluntad de Dios.

Los Serafines han sido creados para amar al Amor Supremo, fuente primera e inagotable de todo amor.
Ellos arden continuamente sin consumirse y se sumergen eternamente en el amor, exclusivamente al servicio del Altísimo. Ellos adoran, aman y alaban a la Santísima Trinidad, es allí donde residen sus sublimes funciones y su principal beatitud.

Pidámosles que nos enciendan en el amor a Dios, que inflamen nuestros corazones de amor por la Madre celestial a fin de amarla mucho, para hacerla amar mucho y lograr así el triunfo de su corazón inmaculado.

Hay cuatro órdenes dentro de las huestes celestiales que son quienes más nos interesan por su especial dedicación a los asuntos humanos: ángeles, arcángeles, principados y tronos.

Si bien parece que hubiese rangos inferiores y superiores, es más apropiado visualizar todos estos órdenes en un gran círculo en el que el más alto y el más bajo están unidos. Los serafines, por ejemplo, que son los más próximos al Creador, también adoran a la parte de Dios que hay dentro de nosotros.

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